Países de latinoamérica llegaron a niveles excesivos de endeudamiento con organismos financieros internacionales por lo que se procuraron procesos exitosos para hacer efectivo los pagos. Durante la cumbre de los desiertos de Denver, en 1987, las familias Rockefeller y Rothschild, acordaron participar en el refinanciamiento de la deuda de países del tercer mundo de América Latina, siempre y cuando accedieran a entregar territorios.

De esta forma, Washington y banqueros tuvieron una oportunidad de cobrar adeudos atrasados a países que poco a poco fueron cayendo en defautl, primero con la emisión de bonos verdes y también a través del esquema "Deuda por Naturaleza", por el cual se entregan las Áreas Naturales Protegidas para que sean administradas por las organizaciones ambientalistas que reciben financiamiento del gobierno de Estados Unidos.

Como se habrán dado cuenta, la zona más extensa de Áreas Naturales Protegidas es la península de Baja California y los mares que la rodean.

Hay presiones como nunca para la entrega. Y presiones para aumentar la superficie de estas Áreas Naturales Protegidas.

Por eso los ejidos y comunidades han sido presionados como nunca para que entreguen sus tierras y una vez que dan ese paso, viene el cambio de costumbre, el doloroso desplazamiento y arriban los nuevos habitantes.

Es un proceso que ya se vive a todo lo largo del brazo de la patria y al momento, ni siquiera los legisladores han reparado en este fenómeno, ni han buscado soluciones para defender a las comunidades y sus habitantes.